Apalancamiento y margen

Apalancamiento y margen

El apalancamiento y el margen son componentes básicos de la negociación con derivados como los CFD y, aunque están estrechamente relacionados, se refieren a aspectos diferentes de la gestión del capital. El apalancamiento permite a un operador controlar posiciones más grandes con menos capital, mientras que el margen se refiere a la porción de fondos necesarios para abrir y mantener esas posiciones. Uno permite al otro, pero cada uno desempeña un papel distinto a la hora de determinar el riesgo y la exposición de un operador.

Cómo funciona el apalancamiento

El apalancamiento es el mecanismo que permite a los operadores amplificar el valor de una operación utilizando fondos prestados. Al aumentar la exposición más allá de lo disponible en la cuenta, los operadores pueden magnificar potencialmente los beneficios, pero también las pérdidas.

Por ejemplo, un ratio de apalancamiento de 100:1 significa que un operador puede controlar 100.000 dólares en el mercado con sólo 1.000 dólares de su propio capital. Esto convierte al apalancamiento en una herramienta eficaz para obtener una mayor exposición al mercado, entrar en múltiples posiciones u operar con instrumentos de mayor valor sin financiar totalmente la operación.

Sin embargo, el apalancamiento también aumenta el riesgo. Por ejemplo, con un apalancamiento de 100:1, un movimiento adverso del precio del 1% podría suponer una pérdida de 1.000 dólares, lo que acabaría con todo el capital del operador. Esto subraya la importancia de la gestión del riesgo y la necesidad de utilizar el apalancamiento con cuidado.

La cantidad de apalancamiento disponible suele depender del activo negociado y de las condiciones reglamentarias.

Qué significa margen

El margen es la cantidad real de capital que un operador debe aportar para abrir una posición apalancada. Se trata de un depósito (un pequeño porcentaje del volumen total de la operación) que actúa como garantía. Este margen garantiza que el broker pueda gestionar las posibles pérdidas de la operación.

Por ejemplo, para abrir una posición de 50.000 $ con un margen obligatorio del 10%, el operador sólo necesita 5.000 $ en su cuenta. El broker presta efectivamente el resto, permitiendo abrir y mantener la posición siempre que el capital de la cuenta se mantenga por encima del nivel de margen exigido.

Por qué los utilizan los operadores

Tanto el apalancamiento como el margen ofrecen ventajas cuando se utilizan correctamente. El margen permite utilizar el capital de forma más eficiente, permitiendo a los operadores diversificar entre varios instrumentos en lugar de concentrar los fondos en una única posición. El apalancamiento aumenta el rendimiento potencial del capital, ya que permite obtener mayores beneficios de las pequeñas fluctuaciones de los precios.

Además, la negociación de márgenes suele estar integrada en las estructuras de las cuentas, lo que significa que se puede acceder a los fondos sin necesidad de aprobaciones adicionales una vez que la cuenta está activa. Esto ofrece más flexibilidad a los operadores que desean responder con rapidez a las condiciones del mercado.

Riesgos a tener en cuenta

La capacidad de multiplicar los beneficios conlleva la misma posibilidad de multiplicar las pérdidas. Una posición que se mueve en contra del operador por un pequeño porcentaje puede resultar en una pérdida significativa, sobre todo cuando el apalancamiento es mayor.

Las posiciones apalancadas también conllevan costes. Normalmente se cobran intereses sobre los fondos prestados durante la noche y, aunque estos costes pueden parecer menores en el día a día, pueden acumularse, especialmente en las operaciones que se mantienen durante periodos más largos.

En mercados con movimientos bruscos de precios, también existe el riesgo de ajustes de márgenes o liquidaciones forzosas. Si el capital de la cuenta cae por debajo del nivel requerido, el corredor puede cerrar posiciones sin previo aviso para protegerse de nuevas pérdidas.